La presidenta de la Asociación Colombiana de Generadores de Energía Eléctrica (Acolgén), Natalia Gutiérrez explicó las tareas pendientes que tiene el sector durante su intervención en el foro ‘Un llamado a garantizar la seguridad energética’, un espacio desarrollado por Portafolio de la Casa Editorial EL TIEMPO en el que participaron actores del sector y del Gobierno para generar una conversación transversal sobre el tema.
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Señaló que la activación del estatuto de desabastecimiento de energía eléctrica, que el Ministerio de Minas y Energía anunció el domingo 29 de septiembre, generó los primeros efectos de precios en el mercado de la energía.
“En el muy cortísimo plazo, hay que tomar unas decisiones ya para poder atacar esos déficits que estamos viendo del 2016 en adelante. Porque el clima nos está jugando una mala pasada y todos han sentido que La Niña aún no se ha materializado, deberíamos estar recuperando los embalses para poder enfrentar el verano que se viene. Colombia tiene verano eléctrico todos los años; un fenómeno de El Niño es un verano eléctrico más largo y más intenso. Necesitamos ahorrar agua y ahorrar energía”, dijo.
De acuerdo con la directiva hay dos momentos en la energía eléctrica y en el gas, y hay que tomar decisiones ya sobre los déficits que se están viendo, por ejemplo recuperar el nivel de los embalses para el verano que se viene, se debe enfocar el cuidado del agua de los embalses y “se deben cuidar esas medidas que la Creg está analizando porque el mayor peligro es que ese precio de escasez de la bolsa, nos hace perder el ahorro del agua y si nos la gastamos de acá a diciembre no la vamos a pasar bien”, argumentó.
Gutiérrez apuntó que en “la coyuntura que tenemos hoy no es por un sistema mal diseñado. Nos ha funcionado en los últimos 30 años y aun así hoy nos están mirando de afuera. Claro, hay que tomar decisiones y ese es el llamado que hemos hecho hacer ya varios años, pero esto no es que el sistema nos falló. Hoy estamos con un problema de precios, pero porque no ha entrado la energía suficiente que debía entrar al sistema; porque no han entrado las líneas que tienen que entrar”, señaló.
En lo referente al sector del gas natural, Luz Stella Murgas, presidenta de Naturgás, señaló que el panorama actual para este energético “está en cuidados intensivos”.
“No es una alerta, como sucede en otros escenarios, es una realidad. No hay gas local suficiente en firme para respaldar las contrataciones que nos permiten llevar de manera segura y confiable el servicio de gas natural a hogares, comercios, vehículos e industrias. Eso obliga tanto al Gobierno Nacional como a la industria a tener que recurrir a fuentes externas de gas. A gas importado para tener que cubrir el 100 % de la demanda no térmica”, explicó.
Ahora bien, uno de los impactos directos que podría tener que el país recurra a la compra de gas del exterior tiene que ver con las tarifas de los hogares. “A Colombia y a los colombianos se nos acabaría el gas barato. Para poder evitar cualquier racionamiento nos vemos obligados a importar gas natural para atender la demanda no térmica y eso va a tener un impacto en precios”, añadió la presidenta de Naturgas.
La líder gremial señaló que los efectos en los precios dependerían de las cantidades de gas que se tengan que importar. Por ejemplo, en un escenario en el que en el 2025 y 2026 se tuviera que cubrir la demanda en un 50 por ciento con gas local y el restante con importado, las tarifas podrían incrementarse en un 25 por ciento.
Por su parte, el presidente del Grupo Energía de Bogotá, Juan Ricardo Ortega, señaló que, si bien hay soluciones para atender la problemática de la industria energética, también se requiere de dar señales muy claras y condiciones de confianza. En especial, recordando que “nadie invierte en un mundo en el cual no le dicen cuáles van a ser las reglas“.
En términos de impacto para el sector de energía, Ortega indicó que, aunado con el tema del gas, si las condiciones climáticas continúan, los precios podrían elevarse.
“Si el clima sigue como está, y esto se escapa a la voluntad de ninguno de los actores, los precios van a ser altos porque vamos a depender del gas y el gas va a tocar importarlo. Entonces es la cuadratura del círculo. No hay salida sin precios elevados, desafortunadamente. Pero, hay salida si se hacen las inversiones y si se retoman temas como la exploración de todas las fuentes de gas que hay”, indicó Ortega.
El director de la Unidad de Planeación Minero Energética (Upme), Adrián Correa, destacó que es necesario hacer equipo entre todos los actores del sector para poder hacerle frente a esta contingencia. “Precisamente, parte de los retrasos heredados se generaron por falta de mayor presencia y una mayor articulación entre las comunidades, las empresas y el Estado”, rescató.
También dio a conocer que se viene trabajando para generar más condiciones de confiabilidad y hacer los ajustes necesarios, por ejemplo, con la promoción de la flexibilización de la infraestructura para poder garantizar el uso eficiente de los recursos.
Por otro lado, Gustavo Adolfo Guerrero, procurador delegado para asunto ambientales, mencionó la importancia de generar las medidas regulatorias para que ninguno de los actores de la cadena tenga mayores impactos que desincentiven la inversión y que las señales que se brinden sean de institucionalidad.