Un colombiano, de 39 años, cuya identidad no trasciende aún, murió acribillado en las últimas horas en la carretera que comunica San Rafael de Alajuela con Belén de Heredia, Costa Rica.
La Cruz Roja envió ambulancias luego de recibir la alerta por el sistema de Emergencias 911. Cuando la primera unidad llegó, encontró al paciente sin vida con cuatro impactos en el cuello y el tórax, por lo que dejó el lugar en custodia de la Fuerza Pública y del Organismo de Investigación Judicial. Agentes de la Policía Judicial se hicieron cargo de las pesquisas y del levantamiento del cuerpo poco antes de la medianoche del domingo pasado.
Se alertó a las autoridades de protección de menores, pues dentro del carro iba una menor, de cuatro años, la cual fue encontrada llorando, pero sana y salva. De acuerdo con las primeras versiones, se trataría de la hija del hombre e iba en la silla trasera del carro.
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Las indagaciones de la Policía revelan que dos sujetos en moto dispararon contra el conductor en al menos cinco ocasiones y se dieron a la fuga. Por esta razón, los agentes judiciales revisarán varias cámaras de video que la Policía Municipal de Belén tiene en los alrededores, para tratar de identificar a los pistoleros que perpetraron el homicidio.
Inicialmente todo parece indicar que se trató de un ajuste de cuentas, ya que los homicidas no se llevaron nada y escaparon inmediatamente después de cometer el atentado.
De acuerdo con medios locales, los apellidos de la víctima son Cerna Tovar. Fue trasladado para la realización de la autopsia mientras se adelanta la investigación con el fin de dar con el paradero de los sicarios. Por el momento, no se conocen más detalles ni la Embajada de Colombia en Costa Rica se ha pronunciado sobre el caso.
El sujeto tendría 39 años, de acuerdo con información preliminar.
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Cerca de ese lugar, en San Antonio de Belén, otro extranjero fue asesinado a finales del año pasado cuando le propinaron cuatro balazos a la orilla de la vía férrea en un posible ajuste de cuentas.
Este fin de semana, un hecho similar ocurrió en Palmar Norte de Osa, provincia de Puntarenas, cuando un menor de dos años sobrevivió al ataque contra su padre, quien falleció baleado cuando esperaba que saliera su esposa del trabajo en un supermercado de la zona.
La cifra de homicidios se eleva a 352 en los 206 días que se leva del 2022, es decir 28 casos más que en igual periodo del año pasado en Costa Rica. La provincia de Alajuela muestra este año un fuerte incremento de muertes homicidas pues registra 62 asesinatos, mientras que en igual periodo del año pasado esa provincia tenía 41.
Gran parte de ese incremento en Alajuela se debe a las nueve víctimas que se han registrado por riñas en el complejo La Reforma, otra cifra que ha roto las marcas en lo que va de este año.
LA NACIÓN / Costa Rica (GDA) – Tendencias EL TIEMPO
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