El fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, llegó a Sudán, indicó este domingo un medio estatal de este país africano sumido en una continua crisis desde el derrocamiento en 2019 de su líder, acusado de genocidio.
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“El fiscal de la CPI, acompañado de una delegación, mantendrá reuniones con altos funcionarios y visitará la región de Darfur”, indicó la agencia SUNA la noche del sábado. Durante los encuentros, el jurista evaluará la evolución del caso en contra de Omar al Bashir, expresidente sudanés, acusado de genocidio.
La visita está prevista hasta el 25 de agosto, y es la tercera de un fiscal de la
CPI a Sudán desde al Bashir que fuera expulsado del poder en 2019.
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La predecesora de Khan, Fatou Bensouda, mantuvo unas conversaciones en Sudán en mayo de 2021 que abrieron la puerta a la posibilidad de procesar en La Haya a exdirigentes sudaneses por crímenes de guerra.
Darfur, una amplia región del oeste de Sudán, se vio devastado por una guerra civil que comenzó en 2003 entre el régimen de mayoría árabe de Omar al Bashir y los insurgentes de minorías étnicas locales, que denunciaban sufrir discriminación.
Personas que protestan contra el golpe militar en Sudán marchan durante una manifestación en la “Calle 60” en el este de la capital, Jartum, el 13 de noviembre de 2021.
Al Bashir envió a la milicia armada de los Janjawid para aplastar la rebelión. En 2019 fue derrocado y encarcelado, y está bajo orden de arresto de la CPI, al igual que otros dirigentes de su régimen, por “crímenes contra la humanidad” y “genocidio” en Darfur.
En abril, un ex mando de la milicia Janjawid, Ali Muhamad Ali Abd al Rahman, compareció en La Haya en el primer juicio de la CPI por crímenes de guerra en Darfur. Según Naciones Unidas, 300.000 personas murieron y 2,5 millones se vieron desplazadas durante el conflicto de Darfur.
En 2020, Sudán firmó un acuerdo de paz con varios grupos rebeldes, algunos de ellos de Darfur, con el objetivo de poner fin al conflicto en la región. Desde entonces, varios ex líderes insurgentes asumieron altos cargos en el gobierno.
El líder de Sudán Omar al-Bashir, estuvo en el poder durante tres décadas.
Al Bashir, condenado por corrupción en diciembre de 2019, está en la prisión de Kober en Jartum, y está siendo juzgado en paralelo por su papel en el golpe de Estado que lo llevó al poder en 1989.
El país sigue en una profunda crisis económica y política desde el golpe de Estado del general Abdel Fatah al Burhan el 25 de octubre pasado. El golpe hizo descarrilar la frágil transición democrática instaurada tras la caída de Omar al Bashir.
REDACCIÓN INTERNACIONAL
*Con información de AFP
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