Después del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, enfrentamiento al que se han incluido otras figuras con armamento altamente destructivo como Estados Unidos o la propia Unión Europea, las personas se preguntan qué pasaría si se desatara una guerra nuclear, cómo afectaría al planeta tierra y cuáles serían las consecuencias tras un desenlace de esta magnitud.
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Según un estudio publicado por la revista científica Nature Food, una guerra nuclear entre dos potencias como Estados Unidos y Rusia podría matar a al menos a 5.000 millones de personas; no solo a causa del bombardeo, sino principalmente por la hambruna global que se generaría después.
Los efectos posteriores implicarían incendios, humo, cenizas e influirían incluso en la iluminación solar.
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Un ataque nuclear podría bajar la temperatura global hasta 2 °C.
Al realizar una evaluación basada en un modelo climático, los investigadores dedujeron el impacto que padecería la producción de cultivos como el maíz, el arroz, o la soja. Además, se verían afectados también los suelos para pastoreo y los bancos globales de pesca.
Contemplando la situación más trágica, la obtención de estos elementos tan preciados para la vida se desplomaría en un 90 por ciento, todo en un lapso de 3 a 4 años, aproximadamente.
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No obstante, hay regiones en el mundo que tendrían mayores posibilidades de sobrevivir y son: el sur de América (específicamente Argentina), Australia y una parte de África Central, ya que poseen cultivos más resistentes como el trigo, además no sufren de sobrepoblación; estos factores los pondrían en una hipotética ventaja.
REDACCIÓN INTERNACIONAL Y EFE
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