En vísperas de la conmemoración de la Batalla de Boyacá y el inicio del último año de su mandato, el presidente Gustavo Petro puso en el centro del debate la disputa con Perú por la isla Santa Rosa, un asunto de soberanía nacional en el que está en juego el uso del rio Amazonas por parte de Leticia y que varios gobiernos –incluido el actual- han dejado pasar sin solución lo largo de los años. A pesar de su relevancia, el momento escogido por el mandatario colombiano para defender la soberanía ha sido leído como una estrategia política por parte de sus detractores.
“Petro acorralado por los chats que dan cuenta de su comportamiento indecoroso y por las declaraciones que lo vinculan como conocedor del robo en la UNGRD emprende un montaje contra Perú para distraer el foco de las noticias. Lo de la frontera con Perú no es más que una cortina de humo como las que usaba Chávez”, señaló la senadora María Fernanda Cabal, del Centro Democrático.
El presidente Gustavo Petro en alocución. Foto:Presidencia
La Cancillería colombiana advirtió que, desde la aparición de esta isla, luego de 1970, no ha surtido un proceso de asignación de esta. Tratados internacionales entre ambos países como Salomón Lozano (1922) y el Protocolo de Río de Janeiro (1934) se firmaron antes de su nacimiento.
Ahora bien, nacionales peruanos de la provincia Mariscal Ramón Castilla comenzaron a habitarla y hoy cuenta con cerca de 3.000 habitantes. Recientemente, Perú creó oficialmente un nuevo distrito e incluyó a Santa Rosa dentro de su jurisdicción, según su propia legislación, a pesar de que Colombia envió reiteradas notas de protesta.
Isla Santa Rosa. Foto:Google Maps
El Gobierno peruano señala que hay actos de jurisdicción que demuestran que ejerce legítima ocupación. “Dicha circunscripción territorial se encuentra bajo la soberanía y jurisdicción de nuestro país, de conformidad con los límites políticos internacionales establecidos en el Tratado de Límites y Libre Navegación Fluvial entre Perú y Colombia (…) así como en los trabajos demarcatorios de la Comisión Mixta Demarcadora de Límites”, se lee en el pronunciamiento del Ministerio de Relaciones Exteriores del vecino país.
En ese sentido, la prensa peruana cuestiona la postura del presidente de Colombia, asegurando, al igual que la oposición, que se trataría de un intento por desviar problemáticas internas. “Su reciente acusación contra el Perú por supuestamente “copar” territorio colombiano en la Amazonía constituye el último episodio de una estrategia desesperada: crear conflictos externos para desviar la atención de la crisis interna que carcome su administración”, señaló el diario El Comercio en un duro editorial.
Para el analista y estratega político, Carlos Arias, el presidente Petro ha logrado durante estos tres años “crear agendas paralelas mediante hechos de opinión soportados en declaraciones desproporcionadas para redirigir la atención política y mediática a otros focos que le permitan maniobrar sus intereses o disimular sus errores”.
El presidente Gustavo Petro en alocución. Foto:Presidencia
Según Arias, en este caso particular “busca distraer de la evaluación de tres años de una pobre gestión, el cambio polémico de sacar otra ministra en Ambiente y reemplazarla con la polémica Irene Vélez”.
En cambio, la internacionalista Sandra Borda considera que, si bien el jefe de Estado ha generado debates alrededor de propuestas e ideas que pocas veces se concretan en política pública, no debería infravalorarse lo que sucede en el Amazonas.
“El colmo de la exagerada ansia de hacerle oposición a Petro por encima incluso de los intereses del país, es ahora legitimar la posición de Perú y su reclamo sobre Santa Rosa con tal de debilitar a Petro. El problema va más allá de la jurisdicción sobre la isla y hay que conocerlo. Y no hay ningún tratado en donde Colombia le haya reconocido soberanía a Perú sobre esa isla”, sostuvo la experta.
Gustavo Petro y Dina Boluarte. Foto:Presidencia de Colombia y Perú
Y añadió: “Con un gobierno y una oposición así, estamos corriendo el riesgo de que nada nunca sea importante y en medio de la indiferencia y el cinismo que este ambiente político genera, perder de vista asuntos impostergables y que necesitan ser tratados con seriedad”.
Una visión similar tiene el exministro del Interior, Juan Fernando Cristo: “Más allá de las disputas políticas y de petrismo o antipetrismo, hay que tomarse en serio el tema planteado por el presidente Gustavo Petro de la isla Santa Rosa en el Amazonas. Es real el riesgo de que por causa de la sedimentación y desviación del río, Leticia se quede sin acceso directo al Amazonas y no podemos aceptar esa situación. Es cierto además que esa isla no está asignada por tratado a ninguno de los dos países”, escribió en X.
Declaraciones de Benedetti y la canciller (e) Villavicencio
Armando Benedetti se refirió a la isla en cuestión Foto:Google Street / Presidencia de la República
Otro punto de debate que ha surgido en las últimas horas han sido las declaraciones de la canciller (e) Rosa Villavicencio y el ministro del Interior Armando Benedetti, quien cada vez suena más para liderar el Palacio de San Carlos.
Aunque expertos advierten que estas desavenencias deben ser tratadas con prudencia y a través de los canales diplomáticos, desde el Gobierno se habla de escenarios conflictivos si no se llega a una solución. “Lo primero que hay que hacer es una declaración de Estado del presidente. La otra son los reclamos diplomáticos, acudir a la mesa que hay y si no lo cuarto se pondría bien feo”, manifestó Benedetti. Por su parte, Villavicencio manifestó: “No queremos llegar a un conflicto”.
“La conversación por canales diplomáticos sobre este tema es delicada y se debe llevar a cabo con cautela y fuera de los micrófonos y las redes sociales”, expuso Borda.
Se espera que este jueves, durante la conmemoración del 7 de agosto, el presidente Petro vuelva a tocar el tema de la disputa territorial.
Redacción Política