El uso de contraseñas débiles y predecibles continúa siendo una de las principales vulnerabilidades de seguridad digital en 2025. Según informes recientes de NordPass y Comparitech, la secuencia ‘123456’ se mantiene como la contraseña más utilizada a nivel global, una práctica que afecta a usuarios de todas las edades, regiones y ámbitos, incluidos el personal y el corporativo. Especialistas de ESET alertan que este hábito incrementa el riesgo de robo de datos personales, financieros y empresariales.
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Los estudios citados indican que el 25 % de las 1.000 contraseñas más usadas en 2025 están compuestas únicamente por números. Además, “123456” figura entre las más elegidas en todos los grupos etarios analizados: generación Z, millennials, generación X y baby boomers.
Desde ESET Latinoamérica señalan que la persistencia de este patrón demuestra que la falta de prácticas seguras no está asociada al nivel de familiaridad con la tecnología. Tanto usuarios jóvenes como personas mayores recurren a combinaciones fáciles de recordar, pero también de vulnerar.
Contraseñas Foto:Nordpass
América Latina y el aumento de las ciberamenazas
En América Latina, el escenario presenta un nivel adicional de preocupación. A la baja concientización sobre seguridad digital se suma el crecimiento sostenido de las ciberamenazas en la región. De acuerdo con datos de NordPass, contraseñas como “123456”, “password” y variaciones numéricas simples encabezan los listados en países como Brasil, Chile, Colombia y México.
Especialistas advierten que el uso generalizado de credenciales débiles no solo afecta a los usuarios individuales, sino que amplía la superficie de ataque para campañas de fraude, robo de identidad y accesos no autorizados a servicios digitales.
Contraseñas Foto:Cortesía Eset
Riesgos en el entorno corporativo
El ámbito empresarial tampoco está exento del problema. Informes citados por ESET muestran que muchas organizaciones, incluidas aquellas de sectores como salud, finanzas, educación y tecnología, continúan utilizando contraseñas simples en sistemas internos.
Según datos de Verizon, el 70 % de las filtraciones de datos en empresas están relacionadas con el uso de contraseñas débiles por parte de los empleados. La exposición puede derivar en pérdidas económicas, interrupciones operativas y daños reputacionales.
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ESET recordó un incidente ocurrido en octubre de este año en el Museo del Louvre, en París, donde el sistema de seguridad fue comprometido debido al uso de una contraseña evidente. El acceso no autorizado permitió el robo de joyas valuadas en más de 100 millones de dólares, a pesar de contar con infraestructura de seguridad avanzada.
El caso fue citado como ejemplo de cómo incluso sistemas sofisticados pueden ser vulnerados si se apoyan en credenciales predecibles.
El ámbito empresarial tampoco está exento del problema. Foto:iStock
Recomendaciones para mejorar la seguridad de las contraseñas
Para reducir los riesgos, especialistas recomiendan utilizar generadores de contraseñas seguras y adoptar buenas prácticas al crear claves propias.
Entre las principales sugerencias se encuentran usar contraseñas de al menos 12 caracteres, combinar letras mayúsculas y minúsculas, números y símbolos, evitar secuencias obvias o datos personales, y no reutilizar la misma contraseña en múltiples servicios.
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Estas medidas buscan elevar el nivel de protección frente a ataques de fuerza bruta y accesos no autorizados, cada vez más frecuentes en el entorno digital actual.
Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de (ESET). Fue revisado por una periodista y un editor