El presidente Gustavo Petro se refirió nuevamente a la situación de Venezuela y respondió a las críticas y los cuestionamientos por no romper relaciones con Venezuela y no tener “acciones contundentes” por la detención de María Corina Machado.
El mandatario sigue defendiendo la decisión del Gobierno frente a la posesión de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela.
“Las “acciones contundentes” de un gobierno contra otro es lo que hemos visto en Irak, en Siria, en Libia, en Gaza, en el Líbano, en Yemén, en Ucrania, y ahora, como amenaza, contra Panamá, Dinamarca, Canadá”, inició diciendo el mandatario en un trino a través de su cuenta de X.
Y agregó: “Esas acciones no dejan sino heridas en los pueblos que duran por generaciones, he visto bloqueos económicos que condenan a pueblos enteros al hambre buscando su esclavitud, ponerlos de rodillas, he visto que han dejado millones de muertos, incluidos centenares de miles de niños, mujeres y ancianos. Ha llevado a gobiernos colombianos a cometer crímenes internacionales, a bombardear territorios extranjeros, a traer instrumentos de espionaje ilegales, a asesinar fuera de nuestro territorio. a apoyar golpes de estado en los países vecinos y en el propio”.
El jefe de Estado aseguró que no hay elecciones libres bajo bloqueos económicos extranjeros: “Un bloqueo es la máxima aniquilación del voto que deja de ser por completo libre. Es la máxima interferencia contra la libertad antes que las cadenas físicas suenen. Fue un enorme error que países poderosos del mundo presionaran elecciones bajo bloqueo económico en América Latina”.
Asimismo, señaló que los problemas de América Latina los debe resolver América Latina.
“No me exijan que ayude a bloquear a un pueblo hermano con el hambre, que será nuestra propia hambre, no me exijan que permita que el suelo colombiano se use para matar al pueblo hermano, que será nuestra propia muerte. Jamás en un demócrata y en un progresista pueden encontrar la mas mínima disposición a ser el Caín de la historia, el Caín de América”, dijo el presidente.
Además: “Parece que algunos adictos a la muerte, quisieran que la sangre que vemos fluir en nuestro pueblo desde los cien años de soledad, siguiera derramada por litros en el presente siglo y en los siglos que vienen. Colombia no está condenada a la muerte sino a la vida”.
Y agregó que si papel no es condenar a Colombia y América del sur y el Caribe a la sangre, sino a la vida.
MARÍA ALEJANDRA GONZÁLEZ DUARTE
Redacción Política