La Oster Xtreme Mix no es una licuadora común. Desde el primer contacto, este equipo deja claro que está diseñado para quienes buscan potencia, precisión y durabilidad.
Su base negra con detalles metálicos es sólida y estable, mientras que el panel de botones iluminados sustituye los diales tradicionales, ofreciendo un manejo sencillo y moderno.
La jarra de dos litros es de vidrio boroclass, perfecta para quienes preparan tanto sopas calientes como jugos fríos.
Cada detalle, desde la tapa hermética hasta la copa dosificadora integrada, habla de practicidad y de una experiencia pensada para el usuario.
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Motor y tecnología que marcan la diferencia
El corazón de esta licuadora es su motor reversible de 1.500 W, equivalente a dos caballos de fuerza, una cifra poco común en equipos de uso doméstico. Esta potencia le permite pulverizar hielo, semillas, frutas congeladas y granos enteros con facilidad.
El sistema de diez cuchillas con recubrimiento de titanio, dispuestas en cuatro niveles, asegura que los ingredientes se mantengan en movimiento constante para lograr texturas homogéneas.
Además, el giro reversible evita atascos y hace que procesar preparaciones densas, como mantequillas de frutos secos o hummus, sea más sencillo. Esta combinación de potencia y tecnología la hacen una herramienta capaz de llevar resultados profesionales a la cocina de casa.
Una experiencia pensada para el día a día
Probar la Xtreme Mix es entender que no solo es potente, sino práctica. Los programas automáticos —para batidos, trituración de hielo y procesamiento de alimentos— eliminan el ensayo y error: basta con presionar un botón y el equipo ajusta tiempos y velocidades, deteniéndose solo cuando la textura es perfecta.
Durante las pruebas, incluso al trabajar con cargas exigentes, la licuadora mantuvo una estabilidad que inspira confianza; no vibra en exceso ni se siente frágil.
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El ruido, uno de los temores con equipos potentes, está bien contenido. Usando el Apple Watch para medirlo, el pico máximo fue de 84 decibeles en potencia total, con el reloj pegado a la base, mientras que en el programa Smoothie bajó a 64 decibeles, un nivel comparable con una conversación animada.
En la práctica, esto significa que es potente, pero no ensordecedora. Su acople es simple: basta colocar el vaso sobre la base y está lista para funcionar, sin complicaciones ni piezas difíciles de encajar.
Limpieza, durabilidad y valor
La experiencia no termina al apagarla. Su jarra, tapa y copa dosificadora son aptas para lavavajillas, y el recubrimiento de titanio de las cuchillas facilita la limpieza manual. Para el uso diario, basta con llenarla de agua tibia y jabón, encenderla unos segundos y enjuagar.
Además, la tecnología All-Metal Drive sustituye engranajes plásticos por un acople metálico diez veces más resistente, mientras que su motor ha sido probado en más de 10.000 ciclos de uso.
Oster respalda este modelo con un año de garantía y piezas de repuesto disponibles, reforzando que se trata de una inversión a largo plazo.
En Colombia, su precio oscila entre 700.000 y 800.000 pesos, colocándola en el segmento premium, pero muy competitiva frente a marcas especializadas que superan fácilmente el millón.
Por su potencia, diseño, facilidad de uso y materiales, es una licuadora que ofrece una experiencia profesional sin necesidad de equipos industriales.

