Gracias a varios megaproyectos que están en proceso como la primera línea del metro y las troncales de TransMilenio de la avenida 68 y de la Ciudad de Cali, el sector de movilidad ha sido prioridad para las últimas administraciones, y la de Carlos Fernando Galán no es la excepción, pues en este año es el sector que tendrá el mayor presupuesto (7,4 billones de pesos).
(Lea también: Otra importante estación de TransMilenio dejará de operar pronto por las obras del metro de Bogotá: ¿cuál es?).
Mientras que algunos afirman que el plan responde a los retos cotidianos que tiene la ciudad en materia de infraestructura, siniestralidad y micromovilidad, otros dicen que tiene metas “poco ambiciosas” y le faltan ideas innovadoras.
La movilidad aparece puntualmente en dos objetivos. El primero está relacionado con la seguridad y la convivencia de los usuarios tanto en las distintas vías como en TransMilenio. El segundo, con los grandes megaproyectos que se adelantan y el incremento de la capacidad del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP).
Movilidad segura e inclusiva
El primer componente en el que aparece la Secretaría de Movilidad y la empresa TransMilenio está relacionado con la articulación con las entidades encargadas de la seguridad, ya que es un factor importante para los ciudadanos a la hora de escoger cuál medio de transporte usar, y es fundamental para incentivar a los bogotanos a que usen medios más sostenibles.

Se busca reducir el porcentaje de evasión del pasaje de TransMilenio, de 15 al 13 por ciento.
Foto:
Por otro lado, frente a la bicicleta, en 2023 se reportaron 7.162 denuncias por robo, el 8,2 por ciento del total de hurtos reportados. En cuanto a los viajes a pie, la principal dificultad se encuentra en las condiciones de la infraestructura y el uso inadecuado de espacios para la movilidad.
Es así que, con un plan de interinstitucionalidad y planteando estrategias de control y prevención, se espera que más personas se empiecen a mover en modos sostenibles (transporte público, a pie o bicicleta) en Bogotá y la región, pasando de 10’195.243 viajes diarios en 2023 a 10’800.000 en 2028.
También se busca reducir el porcentaje de evasión del pasaje de TransMilenio, de 15 al 13 por ciento.
En cuanto a la seguridad vial, se ha evidenciado una tendencia creciente que alcanzó 542 fatalidades en 2023, usuarios que por lo general se movilizaban en los medios de transporte más vulnerables como la motocicleta, a pie o en bicicleta.
Aumentando el control en las vías, la semaforización y la videovigilancia, se busca la reducción de fallecimientos en un 15 por ciento (es decir, pasar de 542 en 2023 a 461 en 2028).
Los grandes proyectos
En ese sentido, el Distrito se compromete en el cuatrienio a lograr el 100 por ciento de la etapa preoperativa de la primera línea del metro.
Bogotá. 6 de mayo de 2024. Desde el 4 de mayo dejó de operar la estación de TransMilenio de la Calle 26, para iniciar el desmonte y adecuación de calzadas para la construcción del viaducto de la Primera Línea del metro de Bogotá. Foto: Sergio Acero Yate / El Tiempo.
Foto:
Otros objetivos son alcanzar 143 kilómetros en operación de troncales de TransMilenio (es decir, 29 kilómetros nuevos), avanzar en 5 por ciento el proyecto de Regiotram del Norte y gestionar el 100 por ciento de la inserción urbana del Regiotram de Occidente.
Cabe resaltar que, para ayudar a financiar el transporte público, que actualmente tiene un déficit de 3 billones de pesos, se propone aumentar la tarifa de los parqueaderos en un 17 por ciento.
Opiniones divididas
Ahora bien, para José Stalin Rojas, director del laboratorio de movilidad de la Universidad Nacional, estas metas son la continuidad de lo que se planteó desde la alcaldía de Enrique Peñalosa o “incluso desde antes”.
Se va a construir una troncal más en TransMilenio, van a hacer esfuerzo en terminar la primera línea del metro, pero no hay un componente novedoso o innovador
Por su parte, Ómar Oróstegui, director del laboratorio de Gobierno de la Universidad de La Sabana, afirmó que en el plan “se menciona que se gestionarán nuevos proyectos, pero no especifica acciones para los Regiotram o para el corredor de la carrera Séptima, en donde no son claras las acciones a futuro” acerca del Corredor Verde.
Añadió que “aunque tiene apuestas para reducir los siniestros viales, se recomienda establecerlas por actor vial y no por promedio general”.
“Es importante mencionar que en ninguno de los dos documentos (programa y plan) se incluyen acciones frente al fenómeno de los bicitaxis, plataformas de movilidad y domicilios, y el incremento del parque automotor de motocicletas y los siniestros viales asociados a dicho actor”, añadió Oróstegui.
Según Oróstegui, no se incluyen acciones frente al fenómeno de los bicitaxis.
Foto:
“Algunos pueden decir que faltan cosas innovadoras, pero el reto de lo cotidiano, que en el pasado era dejado de lado por el afán de iniciar nuevos megaproyectos es, tal vez, el mayor valor de esta propuesta que construye y mejora sobre lo construido”, indicó.
El concejal Juan David Quintero, por su parte, dijo que es de gran relevancia avanzar en el proyecto para extender la primera línea del metro hasta la calle 100, algo que está en el documento del Plan de Desarrollo, pero que, según el cabildante, no se contempló en las presentaciones que ha hecho el Distrito ante el Concejo.
“Usaquén y Suba están hoy aisladas del resto de Bogotá. Con la extensión de la primera línea del metro hasta la calle 100 las conectaremos con el sur y centro de la ciudad para salir por fin del trancón eterno en el que nos tienen”, dijo.
LAURA VALENTINA MERCADO
REDACCIÓN BOGOTÁ