Mientras que la Corte Suprema de Justicia y el Consejo de Estado han venido depurando el listado para escoger a los que serán sus candidatos para la terna a la Procuraduría, el Gobierno ha sido hermético con los opcionados para representarlo en este listado cuya palabra final la tendrá el Senado.
Conforme a los criterios de
Vale recordar que de acuerdo con la Constitución, la elección de procurador general la hace el Senado y escoge de una terna cuyos tres candidatos tienen distintos orígenes: uno es de la Corte Suprema, otro del Consejo de Estado y el último es nominado por el Presidente.
Esto no quiere decir necesariamente que el designado por el primer mandatario sea la ficha que termine llevándose los apoyos del Ejecutivo, aunque el último antecedente, el de Margarita Cabello en el gobierno de Iván Duque, sí lo fue. Con esto mente, hay que decir que el gobierno de Gustavo Petro ha sido muy reservado en este tema.
Fuentes del gobierno le indicaron en ocasiones pasadas a EL TIEMPO que la intención desde la Presidencia era no repetir lo hecho con la terna a Fiscalía. Es decir, querían sí o sí tener un procurador de la cuerda del primer mandatario y no dejar que este cargo fuera ocupado por un perfil independiente.
Sin embargo, también desde el Ejecutivo indicaron que ven difícil que un candidato tan identificado con el gobierno de Gustavo Petro vaya a ser elegido por el Congreso. Por eso, expresaron que aún está estudiando a fondo el tema para ver cómo lograr una fórmula para que a la cabeza del Ministerio Público llegue una persona que no sea lejana pero al mismo tiempo dé tranquilidad en el Legislativo.
A esto hay que sumarle que desde el gobierno se estaría esperando que los otros nominadores tomen una decisión y así tener margen de maniobra y la última palabra. No solo para saber la posible inclinación de los nominados sino el género de estos. Esto debido a que toda terna debe tener como mínimo una mujer.
Cercanos al gobierno de Gustavo Petro han señalado que todo apunta a que los ternados por las cortes serán dos hombres, por lo que obligatoriamente el Ejecutivo tendría que presentar a una mujer como cuota. Y es que en ambos listados predominan hombres como posibles candidatos finales.
Por el lado del Consejo de Estado, ocho de los 10 finalistas a la nominación son de género masculino. Solo figuran como mujeres la excontralora Sandra Morelli y la exfiscal y exdirectora de la ANDJE Martha Lucía Zamora -que contaría con el rechazo desde el Ejecutivo-. En cuanto a la Corte Suprema, son cuatro aspirantes de género femenino de un listado de 22 precandidatos.
De esta forma, cobran fuerza las versiones de que desde el Ejecutivo tendría que presentarse una mujer, siguiendo con la tendencia de las nominaciones a Fiscalía y de Defensoría del pueblo. Mientras se aclara este tema, versiones apuntan que el Ejecutivo ha manejado tres nombres como posibles aspirantes.
Uno de los que sonaría como posible candidato de la Presidencia es el abogado Héctor Carvajal, que ha representado al primer mandatario en varios casos y cuenta con la particularidad de que es cercano a Álvaro Uribe. Tanto así que este fue el principal gestor de la reunión entre ambos.
Otro de los que figurarían en esa lista es el exministro de Justicia Néstor Osuna, que también estuvo entre los postulados para la Defensoría del Pueblo. Sin embargo, al ser consultado por esta posibilidad, le respondió a EL TIEMPO: “Yo sueno para todo, pero la verdad es que estoy en el vil pavimento”.
La única mujer en este grupo sería Mónica Cifuentes, que ha sido procuradora delegada ante la JEP. Esta cumpliría con la condición de ser mujer. Sin embargo, como ya se dijo, esto no es garantía de que vaya a ser la ficha con la que se la juegue el gobierno Petro, pues el guiño final puede ir con alguno de los nominados de las altas cortes.