A Santa Fe le sobró voluntad y le faltó juego para superar el mal momento que había tenido contra La Equidad. Con 13.537 espectadores en las tribunas de El Campín, perdió 0-1 con Bucaramanga, que acabó con una racha de más de 21 años sin ganar en Bogotá.
El equipo se frenó en Techo y no encontró cómo ponerse en marcha nuevamente este martes, cuando pasó trabajos para atacar y su rival le cobró una de las pocas fallas defensivas que cometió.
Santa Fe estrenó a dos de sus contrataciones foráneas. El zaguero Marcelo Ortiz no tuvo mayores problemas y al atacante Agustín Rodríguez le costó de entrada, en un esquema que el DT Pablo Peirano no había utilizado en este semestre, jugando con un segundo delantero que acompañara a Hugo Rodallega.
Bucaramanga, que tuvo un abanico que abarcaba desde la defensa a ultranza hasta salidas muy peligrosas, remató más al arco que su rival y en el arranque del segundo tiempo sorprendió al León con un gol, con algo de compromiso del portero Andrés Mosquera Marmolejo, que dio rebote tras un remate de Fabián Sambueza. Daniel Mosquera le sacó provecho y abrió el marcador.
A pesar de que Santa Fe probó con variantes diferentes (sacó a los dos laterales, cambió a defensa de tres, jugó con extremos), todo se resumió en jugar para un solo hombre, Rodallega, que esta vez estuvo bien controlado por la zaga visitante.
El equipo se diluyó en la segunda etapa con los cambios y solamente hizo un remate al arco, un disparo de afuera del área que atajó brillantemente el portero Aldair Quintana, más otra opción, mano a mano, de Daniel Moreno con el arquero que resolvió muy mal.
En los últimos 15, Rafael Dudamel, el DT del Bucarmaanga, ya armó un esquema como para aguantar el 0-1 y la pelota se volvió propiedad de Santa Fe, pero los rojos se repitieron en la misma fórmula, centros buscando la cabeza de Rodallega, pero la que aparecía era la de cualquiera vestido de amarillo que estuviera adentro del área.
Hay que ir hasta el 3 de agosto de 2002 para encontrar la última victoria de Bucaramanga contra Santa Fe en El Campín. Y esa racha la acabó de buena manera: cuando tenía que atacar lo hizo y cuando escogió defenderse, también cumplió. Los rojos quedaron en deuda.
José Orlando Ascencio
Subeditor de Deportes
@josasc