
La carta con la que ‘la Inmaculada’ pretende empezar diálogos de paz con el Gobierno llevó a recordar que en otras regiones del país se han pronunciado otras bandas criminales con las mismas intenciones.
En Barranquilla, bandas como ‘los Pepes’ y ‘los Costeños’ también manifestaron dicha intención. Sin embargo, las extorsiones y masacres en las que presuntamente se vieron involucrados algunos de sus miembros los mantuvieron alejados de una negociación al respecto. Tanto así que en marzo de 2023 el ministro del Interior de ese entonces, Alfonso Prada, les advirtió: “El que quiera estar en vía del diálogo con el Gobierno Nacional dentro del marco de la Constitución y la ley –que nos permite hacerlo– solamente tendrá un asiento en la medida que demuestre claramente su voluntad real de respeto con la ciudadanía”.
Unos meses después, en agosto, insistieron en su intención de paz, a través de una carta firmada por los cabecillas Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor, y Digno Palomino.
Pero los homicidios y las extorsiones no han cesado. De hecho, según la Policía Metropolitana de Barranquilla, el ataque sicarial que dejó cuatro heridos el pasado martes de Carnaval en el barrio Los Ángeles es atribuido a un “ajuste de cuentas”.
En zona rural de Santa Marta, tras un fallido intento de las Autodefensas Conquistadores de la Sierra Nevada de entablar diálogos de paz con el Gobierno Nacional, se han registrado dos enfrentamientos armados con el Ejército.
No obstante la presencia de representantes del gobierno distrital, defensores de derechos humanos y miembros de la comunidad, la ausencia de un delegado del Gobierno Nacional marcó el evento.
Por su parte, en Antioquia, desde hace una semana fuertes enfrentamientos armados entre el frente ‘Antonio Galán’ del Eln, la subestructura ‘Jorge Iván Arboleda’ del ‘clan del Golfo’ y las disidencias de las Farc tienen atemorizada a la población civil de la zona rural de Segovia, en el Nordeste antioqueño.
Organizaciones de derechos humanos denunciaron que una avanzada de las Agc en el norte del municipio y enfrentamientos con otros grupos armados tienen en riesgo de confinamiento y desplazamiento a las comunidades de las veredas Altos de Manilas, Lejanías, Panamá Nueve y El Carmen.
Ante la grave situación de orden público, el pasado 9 de febrero el Ejército Nacional desplegó 200 uniformados en Segovia para velar por la tranquilidad de los habitantes de la zona. “Se vienen presentando (los combates) por mantener el control de las economías ilícitas y del territorio (…), lo que ha ocasionado temor y zozobra en la población y el gremio agrominero”, aseguró la Séptima División del Ejército.
El gobernador Andrés Julián Rendón visitó el municipio para sostener una reunión de seguridad con el alcalde, los altos mandos militares y la Defensoría del Pueblo a fin de evaluar la situación. Al término el encuentro, el mandatario departamental lanzó duras críticas al Gobierno Nacional por las conversaciones que actualmente adelanta con estas estructuras criminales.
Estos hechos han generado malestar entre la ciudadanía, pues en varias regiones se ha manifestado apoyo por estas iniciativas en búsqueda de la paz. No obstante, se siguen presentando enfrentamientos y actos como extorsión y amenazas contra comerciantes.
REDACCIÓN NACIÓN

