Colombia y Cuba: el giro de la relación durante el gobierno de Petro – Gobierno – Política

Tan solo tres días habían pasado desde su posesión y una de las primeras delegaciones que el presidente Gustavo Petro recibió en Casa de Nariño fue la cubana. En la reunión se reiteró el mutuo interés por ampliar las relaciones bilaterales. Y aunque con los delegados de otros países el mensaje era prácticamente el mismo, la situación con Cuba parecía traer un acelerador incorporado.

Apenas 24 horas después, el 11 de agosto del 2022, el comisionado de Paz, Danilo Rueda; el canciller, Álvaro Leyva, y el senador Iván Cepeda viajaron a La Habana para intentar reactivar los diálogos de paz con el Ejército de Liberación Nacional (Eln).

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Tras el atentado en la Escuela General Santander en el 2019, perpetrado por el Eln, Duque suspendió la conversación con la guerrilla, cuyos negociadores estaban en Cuba, pues habían avanzado en un proceso de diálogo con el gobierno del expresidente Juan Manuel Santos.

Ahí la tensión empezó a crecer. Duque le pidió a Cuba en reiteradas ocasiones extraditar a los cabecillas del Eln, pero la isla se negó. “Guardar silencio es un gesto inamistoso con Colombia”, sentenció el año pasado el expresidente frente a los reiterados hechos de violencia que el Eln se adjudicó y sobre los cuales Cuba no se pronunció.

Durante los cuatro años de su administración, la relación se paralizó. El embajador de Colombia en Cuba, José Noé Ríos, en diálogo con este diario, explicó que apenas inició su labor en el cargo, en octubre del año pasado, esa fue una de las primeras cosas que quiso arreglar.

José Noé Ríos, embajador de Colombia en Cuba. 

“Desde mi llegada iniciamos un proceso de restablecimiento de confianza. En lo político expresamos nuestro agradecimiento al Gobierno de Cuba por su apoyo a la paz de Colombia y también rechazamos la actitud negativa y hostil del presidente Duque y sus comisionados de Paz”, dice Ríos.

También se rechazó que Cuba siga siendo incorporada por Estados Unidos dentro del grupo de países que apoyan al terrorismo. “Igualmente pedimos el levantamiento del bloqueo económico de Estados Unidos en Cuba”, cuenta.

Según le dijo a EL TIEMPO la vicecanciller, Laura Gil, estas dos últimas posiciones de Colombia son parte de una respuesta que se está teniendo con ellos frente a una “deuda enorme que tenemos con ese país por su acompañamiento en la paz”.

Afirma, además, que “hay algo de reparación” en esta cercanía que se está dando porque “Colombia fue la que tuvo algo de incidencia para que la isla fuera introducida en ese grupo”. Y es que uno de los argumentos de Estados Unidos para incluir a Cuba se basó en la protección que le dieron a los representantes del Eln.

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Los constantes acercamientos se han evidenciado en las visitas de altos funcionarios de lado y lado. En los siete meses que lleva esta administración, Colombia ha realizado cuatro a Cuba y la isla, por su parte, cinco a nuestro país.

“Esto muestra un esfuerzo por restablecer una relación que ha sido históricamente fluida, sólida y respetuosa, la cual no se circunscribe solo al acuerdo entre el Gobierno y las Farc durante la era Santos, sino incluso a la administración Uribe, cuando las relaciones fueron cercanas y muy respetuosas”, explica Juan Nicolás Garzón, internacionalista y profesor del programa de Ciencias Políticas de la Universidad de La Sabana.

Jorge Londoño, decano de la Facultad de Estudios Internacionales de la Universidad del Rosario, fue embajador en Cuba durante los gobiernos de Andrés Pastrana y Álvaro Uribe. Coincide en que en ese entonces la relación fue “muy cordial”. Pero dice que esto no siempre fue así: “Ha sido una relación que parece una montaña rusa, con subidas y bajadas”.

Iván Cepeda (izq.), el canciller, Álvaro Leyva, y el comisionado, Danilo Rueda, en Cuba.

Las relaciones entre Colombia y Cuba se rompieron por primera vez el 9 de diciembre de 1961 y se restablecieron el 6 de marzo de 1975. Casi seis años después, el 23 de marzo de 1981 hubo una segunda ruptura hasta el 19 de julio de 1991, fecha en que se restablecieron a nivel consular. Ahora bien, tras la crisis que se vivió entre 2019 y 2022, Garzón menciona que si bien recuperar la confianza puede tomar un tiempo, ya se han dado gestos. Uno de ellos es la aceptación de Cuba para ser sede del tercer ciclo de los diálogos entre el Gobierno y el Eln.

El internacionalista explica que a ambos gobiernos les resulta conveniente ser cercanos en este tema. “Colombia encuentra en Cuba un socio estratégico para adelantar un proyecto complicado de consolidar, que es el acuerdo de paz con el Eln. Esto tiene el antecedente relevante del acuerdo con las Farc”, dice.

Colombia encuentra en Cuba un socio estratégico para adelantar un proyecto complicado de consolidar, que es el acuerdo de paz con el Eln.

En la delegación son conscientes de eso. Durante la clausura ayer del segundo ciclo en México, el jefe negociador del Gobierno, Otty Patiño, mencionó en su discurso: “Esta es una ocasión para expresar nuestro profundo reconocimiento a más de cuatro décadas de acompañamiento solidario de esa isla para lograr el fin de las guerras”.

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Por el lado de Cuba, Garzón explica que a la isla le sirve esto para “proyectar una imagen internacional de ser un país garante de un acuerdo de paz que compromete la estabilidad en la región. Esto los reivindica, les permite mandar un mensaje a los Estados Unidos de que lo que están haciendo es apoyar intentos de paz”.

No es solo la paz 

La cercanía de las relaciones, sin embargo, no se está dando solo a través de la búsqueda de la paz, sino también de la economía y cultura.

Entre las visitas bilaterales que se han hecho, por ejemplo, del 29 de noviembre al 17 de diciembre de 2022, el Invima y el ICA recibieron la misión técnica del Centro Nacional de Sanidad Animal de Cuba, la cual revisó 28 establecimientos exportadores, las oficinas del nivel central y regional del Invima y del ICA, el puerto marítimo de Barranquilla, las zonas de frontera y algunos predios productores.

Como resultado de dicha auditoría, Colombia obtuvo en enero pasado la autorización para exportar carne bovina, porcina, avícola, productos lácteos y derivados cárnicos a Cuba. “Esta tarea se inicia en pocas semanas”, confirmó Ríos.

Unos días antes, el 14 de noviembre de 2022, cerca de 30 empresarios colombianos, con el ministro de Comercio, Germán Umaña, participaron en la Feria Internacional de La Habana. El propósito era identificar oportunidades de negocios con Cuba.

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Este año, la situación avanzó con el envío de más de 142 toneladas de ayuda humanitaria por parte de Colombia a Cuba. Eran 5.100 kits de cocina, 3.100 kits de noche, 11.275 tejas de zinc, 3.075 perfiles metálicos, 66.300 amarres de teja, 160 tanques de agua de 1.000 litros y 604 tanques de agua de 250 litros con el propósito de ayudar a los afectados por el huracán Ian.

(En contexto: Colombia le enviará a Cuba 142 toneladas de ayuda humanitaria)

Representantes de los Gobiernos de Colombia y Cuba durante la entrega de la ayuda humanitaria.

Esto recibió reparos por parte la oposición. La senadora del Centro Democrático María Fernanda Cabal en su momento escribió: “142 toneladas de ayuda en especie para el régimen asesino de Cuba, mientras millones de colombianos no saben qué darán de comer a sus hijos. El gobierno Petro no es humanitario, sino un amigo de las peores dictaduras”.

Cabal también tuvo críticas con la visita oficial que realizó el pasado 9 y 10 de febrero la vicepresidenta Francia Márquez en el marco de la Feria del Libro de La Habana, en la cual Colombia fue el país invitado de honor. “Impresentable Francia Márquez en una Feria del Libro en Cuba, donde se persigue y castiga la libertad de expresión”, concluyó.

Márquez, por su parte, en esa visita elogió aspectos del sistema de salud de la isla. “La salud preventiva, que es la que ustedes han tenido aquí como eje central, es parte de lo que hoy queremos hacer en Colombia”, dijo.

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La vicepresidenta Francia Márquez inaugurando la feria del libro de Cuba.

Foto:

Eliana Aponte / ELTIEMPO

Allá estuvo acompañada del viceministro de Relaciones Exteriores, Francisco José Coy Granados, y la exministra de Cultura, Patricia Ariza. Se reunió, además, con el presidente y vicepresidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez y Salvador Valdés Mesa, respectivamente.

El pasado 21 de febrero, por otra parte, el director encargado del Invima, Francisco Giuseppe, se reunió con el ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera de Cuba, Rodrigo Malmierca Díaz. Allí, según contaron, se reafirmó la voluntad conjunta de crear una Agencia Latinoamericana de Medicamentos con México, Bolivia, Ecuador, El Salvador, Honduras, la República Dominicana, Jamaica y Dominica.

El embajador Ríos agrega que recientemente se firmó un convenio de cooperación entre Procuba y ProColombia. Esta última entidad tendrá a Jorge Pulecio como representante en La Habana para estimular las relaciones comerciales. También, el mes pasado, se firmó un memorándum de entendimiento que tiene como propósito fortalecer intercambios culturales.

La relación Colombia-Cuba ha sido una que parece una montaña rusa: con subidas y bajadas

A esta lista se suma que la empresa Aerolínea del Café S. A. está adelantando trámites de licencia para iniciar operación de vuelos chárter regulares entre Pereira-La Habana-Varadero y Santiago de Cuba y viceversa. “Tienen tres aviones con capacidad de 180 pasajeros cada uno. Se espera que la operación se inicie en mayo”, dice el embajador.

Estos acercamientos son vistos con buenos ojos por los analistas, pero no por los sectores del país que no están de acuerdo con que el país tenga lazos tan estrechos con el régimen cubano.

Por otro lado, David Castrillón, docente de la Universidad Externado, añade que este proceso, además de fortalecer las relaciones que ya se arreglaron, también le ayudará a Petro a ganar un apoyo adicional frente a “temas espinosos” que quiere sacar adelante, como la transición energética. “Este gobierno está apostando a crear una marea de gobiernos que acoge estas iniciativas, la cual eventualmente forzará a otros a seguirlas. Cuba ahí juega un rol importante”, expone.

Así que si bien la relación Cuba-Colombia se ha fortalecido a partir de la paz, con esta serie de intercambios comerciales, humanitarios y culturales, se prevé que la cercanía se estreche aún más a lo largo de este gobierno.

Aura Saavedra Álvarez
REDACCIÓN POLÍTICA



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