La reventa de boletas para espectáculos como conciertos y partidos de fútbol, es una práctica común en Colombia y en todo el mundo. Sin embargo, su legalidad ha sido motivo de controversia y debate a lo largo de los años.
Actualmente, en Colombia es un tema legal que se encuentra sin definir. El Código Penal colombiano y Ley 599 de 2000 establecen que la reventa de boletas sin autorización puede ser sancionada con multas y penas de prisión. Sin embargo, la aplicación de estas leyes varía y rara vez se persigue a los revendedores.
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A pesar de las diferentes prohibiciones legales, la reventa de boletas sigue siendo una práctica demasiado frecuente en el país. Actualmente, existen diferentes plataformas y personas que se dedican a esta actividad, aprovechándose de la alta demanda de entradas para eventos populares, como los conciertos.
La Superintendencia de Industria y Comercio dice que es importante destacar que la reventa de boletas puede generar problemas para los consumidores, como la adquisición de boletas falsas o duplicadas, lo que puede arruinar la experiencia y generar pérdidas económicas .
Existen un sinfín de argumentos a favor de legalizar y regular adecuadamente la reventa de boletas, con el fin de controlar el mercado y garantizar la autenticidad de las entradas.
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El Decreto 1622 de 2022 busca estandarizar el proceso de adquisición y emisión de boletas para espectáculos, también el ingreso a los estadios de fútbol en Colombia. Este decreto establece la asociación de la boleta al documento de identidad, permitiendo la verificación de antecedentes de los espectadores y la aplicación de restricciones de derecho de admisión en los eventos futbolísticos
Es por lo anterior que la legalidad de la reventa de boletas en Colombia es un tema bastante controvertido y no resuelto, pues la falta aplicación a la normativa vigente ha llevado a un mercado secundario en auge que beneficia a algunos y perjudica a otros.