Taiwán: China alista ejercicios militares tras visita de Pelosi – Asia – Internacional

Taiwán se mantuvo este miércoles desafiante ante las amenazas de maniobras militares chinas cerca de sus costas tras la visita a la isla de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi. La legisladora demócrata visitó suelo taiwanés el martes, pese a las amenazas de Pekín, que considera la isla como parte de su territorio.

(Lea aquí: Embajada de China en Colombia arremete por visita de Nancy Pelosi a Taiwán)

El Gobierno chino considera la visita de Pelosi una “violación a su soberanía”
y anunció que hoy comienzan una serie de maniobras militares, con “disparo de municiones reales de largo alcance” en el estrecho de Taiwán, que separa la isla de China continental.

(En contexto: Cuándo y cómo China perdió Taiwán (y cuál es el estatus de la ‘isla rebelde’)

“Estados Unidos viola la soberanía de China bajo el disfraz de la llamada ‘democracia’ (…). Quienes ofenden a China serán castigados”, dijo este miércoles el ministro chino de Relaciones Exteriores, Wang Yi, al margen de una reunión de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean) en Phnom Penh.

Las autoridades taiwanesas indicaron que durante el día 27 aviones militares chinos habían incursionado en su zona de defensa aérea (más vasta que el espacio aéreo de un país).

Pero Taipéi no dio señales de amedrentarse. “Frente a las crecientes y deliberadas amenazas militares, Taiwán no retrocederá (…). Mantendremos la línea de defensa de la democracia”, declaró la presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen.

China responde a visita de Nancy Pelosi a Taiwán: 'Habrá medidas contundentes'

Manifestantes en China han usado fotos de Nancy Pelosi para expresar su rechazo a la visita de Pelosi.

Foto:

EFE/EPA/JEROME FAVRE

La visita de Pelosi contraría las tentativas chinas de aislar a la isla. “Nuestra delegación (…) llegó a Taiwán para dejar claro, de forma inequívoca, que no abandonaremos nuestro compromiso con Taiwán y que estamos orgullosos de nuestra amistad duradera”, declaró Pelos durante un acto con la mandataria taiwanesa.

Antes de partir de Taiwán con rumbo hacia Corea del Sur, Pelosi se reunió con disidentes chinos, entre ellos Wu’er Kaixi, uno de los líderes estudiantiles de las protestas prodemocráticas de la plaza Tiananmen en 1989, sangrientamente reprimidas.

Nancy Pelosi

Pelosi abandonó este miércoles Taiwán luego de su visita .

Lo cierto es que Estados Unidos se asoma a una escalada de tensiones con China. De hecho, Washington insistió este miércoles en que no ve motivo para que Pekín convierta el viaje de Pelosi en una “crisis”.

En todo momento, la Administración de Joe Biden ha buscado desvincularse de esta visita y ha subrayado que es una decisión personal de Pelosi, la responsable de mayor rango estadounidense que visita Taiwán en un cuarto de siglo.

El director ejecutivo del laboratorio de ideas Global Taiwan Institute, Russell Hsiao, dijo a Efe que aparentemente la Casa Blanca hizo todo lo que pudo para desaconsejar a Pelosi que fuera a Taiwán, a la luz de las desavenencias públicas y las declaraciones oficiales sobre la inquietud de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos sobre este viaje.

“Básicamente, esta es una decisión de la presidenta (de la Cámara Baja) y creo que el presidente Biden respetó el principio fundamental del sistema político de Estados Unidos, la separación de poderes”, apuntó.

El experto en Asia Thomas Shattuck, del centro de pensamiento Foreign Policy Research Institute, precisó que cuando un miembro del Congreso hace este tipo de viajes normalmente tiene el apoyo de las Fuerzas Armadas en lo que respecta al transporte y la logística.

Frente a las crecientes y deliberadas amenazas militares, Taiwán no retrocederá (…). Mantendremos la línea de defensa

Por tanto, dedujo, “hubo coordinación dado que ella tomó un avión militar y el presidente es el comandante en jefe. Pero más allá de eso, está muy claro que la Administración no está muy contenta con su decisión”.

Sobre cómo interpretar las maniobras militares chinas, el historiador especializado en Taiwán James Lin, profesor de la Universidad de Washington, auguró que es posible que las represalias de Pekín continúen en las próximos días y semanas, ya que no ha hecho más que incrementar “sus dotes teatrales nacionalistas” de cara a su audiencia doméstica y extranjera. Aun así, Lin señaló que “es posible” que China solo aplique el castigo a Taiwán y no contra Estados Unidos.

Shattuck se manifestó seguro al “100 por ciento” de que va a haber una escalada de tensión entre las dos grandes potencias internacionales, que va a hacer que la región del Indopacífico sea más “inestable”.

En su opinión, las maniobras militares de hoy por parte de China suponen “una medida muy provocadora”. Esos ejercicios, agregó, suponen que habrá embarcaciones que tendrán que ser desviadas para evitar el estrecho de Taiwán, porque no se sabe lo que va a pasar.

Taiwán denuncia la incursión de 21 aviones militares chinos su ADIZ

Valla de propaganda militar en China.

Foto:

EFE/EPA/MARK R. CRISTINO

Por su parte, el ministerio taiwanés de Defensa dijo que los ejercicios violan las aguas territoriales de la isla y denunció “una acción irracional que desafía el orden internacional”. Entre tanto, el G7 afirmó que “no existe ninguna justificación para utilizar esa visita como pretexto a una actividad militar agresiva en el estrecho”.

Por lo pronto, Estados Unidos tiene varios buques de guerra en la zona: Una portavoz de la Flota del Pacífico de Estados Unidos detalló a Efe el martes que el país tiene cerca de Taiwán el Grupo de Combate del Portaaviones Ronald Reagan y el barco anfibio USS Tripoli.

En otros frentes, el ministerio de Comercio de Pekín también anunció sanciones económicas, entre ellas la suspensión de la exportación hacia Taiwán de arena natural, un componente clave en la fabricación de semiconductores, una de las principales exportaciones de la isla. Y la administración china de aduanas canceló la importación de frutas y ciertos pescados desde Taiwán.

AFP Y EFE

Más noticias


Fuente