El atentado del Eln a una base militar en Puerto Jordán, Arauca, que tiene en jaque el proceso de paz con dicha guerrilla -el presidente Gustavo Petro advirtió que “prácticamente” cierra el proceso- ya generó las primeras reacciones.
Conforme a los criterios de
El ataque de este grupo subversivo provocó el fallecimiento de dos uniformados y otros 25 resultaron heridos.
Esto dijo el presidente Petro: “Una volqueta cargada con explosivos (…) puesta por el ELN, con quienes estábamos conversando de paz y como sucedió aquella vez, en otro sitio, aquí cerca, en la Escuela de la Policía que murieron muchos alférez, es prácticamente una acción que cierra un proceso de paz con sangre”.
El presidente del Senado, Efraín Cepeda, indicó que de confirmarse el levantamiento de la mesa “sería la consecuencia obvia de un Eln que fue de burla en burla amparado en el proceso de paz. El Estado debe recuperar la seguridad del país dejando que las fuerzas armadas cumplan la misión que la constitución les asigna. Muchas vidas hubiéramos salvado si esta supuesta decisión se hubiera tomado antes, aunque lo importante son las vidas que se salvarán de aquí en adelante si la decisión es cierta. Todo nuestro apoyo a las fuerzas militares”, expuso.
El senador de oposición Carlos Fernando Motoa se pronunció y aseguró que la ‘paz total’ es un “absoluto fracaso”. “El Eln nunca tuvo gestos de paz reales. El presidente Gustavo Petro no sólo mintió cuando dijo que lograría la paz con el Eln en tres (3) meses si era elegido Presidente en 2022, también mantuvo acercamientos con esa agrupación durante sus primeros dos (2) años aunque toda la evidencia apuntaba a que estaban usando la negociación para fortalecerse”, dijo Motoa.
El congresista recordó que en el 2023 el Eln contaba con 6.100 efectivos con presencia en 19 departamentos y 184 municipios del país.
“Con una presencia significativa en el Sur Occidente, donde han hecho del Chocó y el Norte del Valle su principal bastión”, dijo.
Para Motoa, el Eln fueron los principales beneficiarios de los ceses al fuego, en medio de los cuales han ordenado Paros armados periódicos, secuestros y posibles casos de reclutamiento forzado.
“¿Cuántas vidas se habrían salvado de no ser por la terquedad del Jefe de Estado?”, concluyó.
Por su parte, el director de la Fundación Paz y Reconciliación, Pares, León Valencia, señaló que “el Eln le ha dado la razón a quienes han dicho que no tiene ninguna voluntad de paz, lastimosamente este reducto del conflicto armado que ha golpeado al país durante 60 años ha decidido quedarse en una violencia tan inútil como dañina”.
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, es hasta el momento el otro alto funcionario que se ha manifestado dándole la razón a las palabras del Presidente: “No puede seguir una mesa de negociaciones en medio de la sangre. El Eln ha perdido una oportunidad histórica para negociar la paz (…) al Eln definitivamente lo dejó el tren de la historia”, dijo.
Inti Asprilla, senador por la Alianza Verde, también remarcó que el atentado en Arauca es una prueba más de la falta de voluntad de paz del Eln: “Con el atentado en Arauca el Eln demostró que no quieren paz, y que tienen la guerra y la barbería como su modo de actuar, plenamente de acuerdo con el cierre de la negociación con ellos. A mi juicio, han perdido la última oportunidad que les dio el país“, escribió en X.
JUAN PABLO PENAGOS RAMÍREZ
Periodista de Política