Desde niños, luego de gatear, aclamadas figuras del fútbol sintieron atracción por el balón. Aquella pelota que poco a poco patearon hasta que la destreza les permitió anotar un centenar de goles, ganar importantes títulos y ser denominados como leyendas.
Sus pequeñas piernas no defraudaron. Gracias al entrenamiento y la disciplina que les inculcaron, Pelé, Maradona, Messi y Cristiano Ronaldo -considerados los más importantes de acuerdo con medios especializados- han dejado un legado claro.
¿Cómo se veían las grandes figuras del fútbol cuando eran niños?
Pelé (1940-2022)
El llamado ‘Rey del fútbol’ inició su camino prometedor apoyado por su papá, João Ramos do Nascimento, quien recibió aplausos por su talento a mediados del siglo XX. Él quería cultivar en su pupilo el ‘jogo bonito’ (juego bonito). Y lo logró.
El pequeño Edson Arantes do Nascimento, con una sonrisa característica, le siguió los pasos. Se enamoró de la pelota, pese a que le tocara jugar en un principio con una hecha de trapos viejos, pues no tenían dinero para más.
Sus amigos lo apodaron Bilé, como un arquero de esos años, pero con el tiempo se transformó en Pelé.
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Ese niño al que le podía quedar grande el uniforme se convirtió en el más aclamado de su país y el mundo, tal como se lo prometió a su padre cuando lo vio llorar por la derrota de Brasil en el Mundial de 1950.
Pelé cuando era niño. Era tan humilde que nadie sospechó siquiera que movería el mundo del fútbol su pasión, un deporte que une al mundo y es sano deportivamente. Gracias Claudio Iturri Portugal por la foto pic.twitter.com/SDZ78KoadJ
— Jesus Jimenez (@centrumnews2021) December 30, 2022
De los cuatro Mundiales en los que participó, ganó tres con su selección. Es el jugador más joven de la historia en jugar un Mundial. Aunque no hay un número oficial de sus goles, se le calculan más de 1.280 en toda su trayectoria.
“Edson va a morir, Pelé no, Pelé es inmortal”, dijo alguna vez para enfatizar en su legado.

Pelé murió el jueves 29 de diciembre de 2022 en Sao Paulo.
EFE/EPA/WILL OLIVER
Maradona (1960-2020)
El argentino Diego Armando Maradona al igual que Pelé puede que sea inmortal en términos deportivos. Como el brasileño, fue elegido el mejor atleta del siglo XX tras una controversial elección en la que no hubo acuerdo y la Fifa les dio el premio a ambos.
Su infancia estuvo marcada por la obsesión hacia el fútbol. En una humilde casa que se inundaba cuando llovía y en la que no había agua potable, creció anhelando que sus pies le permitieran afrontar la pobreza.
“La primera imagen de la infancia que me viene a la cabeza es cuando mi mamá me iba a buscar para ir a la escuela y yo me escondía entre el maíz. Y después jugando a la pelota en una calle de tierra, con mucha tierra”, recordó, en declaraciones citadas por el medio local ‘Infobae’.
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A los 15 años debutó en un partido contra el equipo Talleres de Córdoba. Ese partido lo jugó con los únicos pantalones de pana que tenía, sin importar las burlas de sus rivales. “Me miraban el pantalón, pensaban este me equivoqué de closet, ¡qué closet si no teníamos ni closet!”, expresó en una charla con la plataforma ‘AFAPlay’.
617 goles, una Copa del Mundo (México 1986), decenas de distinciones y el amor de su país natal componen parte de sus cosechas.

Cristiano Ronaldo (1985)
“Si la voluntad de Dios es que este niño nazca, que así sea”, decidió Dolores dos Santos Aveiro, cuando el médico le negó que abortara al bebé quien, décadas después, tendría su nombre en la boca de miles de fanáticos: Cristiano Ronaldo.
El menor de cuatro hermanos no fue ajeno a la dura pobreza. Su papá, con problemas mentales y adicto al alcohol, poco hacía por que la familia superara las dificultades, así que todo quedó en manos de la cocinera Dolores.
“Realmente no conozco a mi padre al 100 por ciento. Era una persona borracha. Nunca hablé con él, como una conversación normal. Fue difícil”, contó en una entrevista para el periodista Piers Morgan de ‘ITV’.
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El fútbol fue su escape. Con sus churcos cabellos infantiles, se sumergió en las canchas de su natal Portugal. “Si no se hubiera dedicado al fútbol, probablemente habría caído en las drogas”, sentenció.
El ganador cinco veces del Balón de Oro de la Fifa ha sido uno de los más grandes tras su paso por importantes clubs. CR7 ha jugado en el Manchester United, Real Madrid, Juventus, entre otros, con más de 800 goles a sus pies.

Lionel Messi (1897)
Messi se enorgullece de que en su casa “no faltó nada” porque su papá, trabajador de una fábrica de acero, en Argentina, se esforzó mucho.
“Hacía horas extras y laburaba más. Pero también he tenido amigos que vivían en una villa, que no tenían para comer, no tenían luz, no tenían agua. También lo viví de cerca”, señaló en una entrevista con el diario ‘Olé’.
La pasión por el fútbol la encontró cuando jugaba con sus hermanos mayores. La señora Celia Olivera, abuela del argentino, se encargó de darle ánimos e incluso peleó con el entrenador de un equipo infantil para que lo dejara entrar a la plantilla.
“Yo era uno de los más pequeños y por lo tanto todavía no había categorías para mí, pero a una de ellas le faltaba un jugador. Mi abuela le dijo al entrenador que me dejara jugar, a lo que el entrenador respondió: ‘¿Cómo podemos? Es demasiado pequeño, no puede’. A pesar de esto, mi abuela todavía insistía en ‘déjalo jugar, déjalo jugar’”, recordó.
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La intuición de la abuela no falló, ya que el equipo infantil Newell’s Old Boys lo fichó.
El apodo ‘La pulga’ retrató en su momento la corta estatura que alcanzaba comparado con sus compañeros, tanto así que su familia y entrenadores se preguntaron por qué no crecía; la respuesta casi trunca el sueño de Messi.

Alberto Estévez. EFE
Le diagnosticaron a los diez años una deficiencia en la hormona del crecimiento, para lo cual requería tratamientos costosos de 900 dólares por mes. Su humilde familia no tenía cómo costear las inyecciones, pero sin imaginarlo se les abrió una puerta mayor: Barcelona se ofreció a pagarle todo con la condición de que firmara un contrato para iniciar su camino profesional.
Más de 800 goles, una Copa del Mundo, siete veces ganador del Balón de Oro y seis veces de la Bota de Oro, se alza como otra de las figuras del balón pie.
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SEBASTIÁN GARCÍA C.
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