Millonarios, finalista de la Copa Colombia tras empatar 1-1 contra Cúcuta – Fútbol Colombiano – Deportes


Millonarios tuvo que apelar al carácter para aguantar casi una hora con un jugador menos contra un Cúcuta Deporitvo luchador, que no parece de segunda división, que lo hizo sudar petróleo para conseguir un empate a un gol.

 Y ahora tiene una nueva cita con la historia, una nueva final contra Atlético Nacional, casi un semestre después de la histórica disputa por la Liga del primer semestre.

Cúcuta sorprendió a Millonarios de entrada, a tal punto que no se sabía cuál de los dos era campeón de Liga y cuál estaba en la B. La presión del local fue enorme, no dejaba respirar a su rival y le pegó un golpe muy rápido.

A los 17 minutos, Jaime Peralta le ganó un duelo muy físico a Andrés Llinás, en una de las pocas jugadas en la que el zaguero perdió, y remató desde afuera del área para vencer a Álvaro Montero, que pudo haber hecho algo más: la bola lo sorprendió y terminó agachándose, sin opción de parar el tiro.

Millonarios apeló a lo que sabe, agarrar la pelota y abrir las bandas, para buscar el empate en el juego de ayer y la ventaja en la serie, tras el 1-0 en El Campín el jueves pasado. Y Daniel Ruiz, que de Chile llegó directo a Cúcuta tras jugar los Panamericanos, le dio lo que parecía la tranquilidad de los azules: remate desde el borde del área que se coló en el ángulo.

¿Calma? Para nada. Fue un partido duro, ríspido, con un Cúcuta envalentonado, que quiso atropellar, por las buenas o por las malas, a un Millonarios que terminó defendiéndose. Y más, después de otro error de Montero que le costó la expulsión a Stiven Vega, en el minuto 51: le dio una bola dividida, el volante la perdió y tuvo que cometer una falta para evitar el 2-1. Ya tenía amarilla y el árbitro Carlos Betancur, de muy floja actuación, lo expulsó.

Desde ahí, el juego se desarrolló en los alrededores del área azul y los jugadores de Millos no le conocieron el color de los guantes al portero Mastrolía.

Hubo discusiones, roces, un penalti que reclamó el Cúcuta que no existió y otro para Millonarios por falta contra Fernando Uribe que Betancur no sancionó. Y un ambiente hostil al final. Los de Gamero sufrieron, pero van a la final.

José Orlando Ascencio
Subeditor de Deportes
@josasc



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